Las Onzas Troy en México y la del Capricho

Las monedas de inversión o en inglés “bullion coin” son aquellas que una nación acuña y distribuye periódicamente (generalmente año tras año)  con múltiples propósitos, como establecerse en el mercado de los metales internacionales con sus propias piezas, satisfacer a inversionistas o poder tener alguna pieza de metal precioso que se mantenga como un depósito de valor o una inversión. Estas generalmente son en oro, plata, y en múltiplos de onzas o en gramos y kilogramos, recientemente otras naciones han optado por diversificar sus acuñaciones en platino, paladio, por solo mencionar algunas.

En México, se tiene la costumbre de llamarle a las piezas con alto valor de metal fino “onza” y en ocasiones a cualquiera de plata “onza troy”, pues bien,  de manera correcta, (dentro del ámbito Numismático) la Onza Troy es aquella que ostenta en su diseño la prensa de volante, mientras que la “Onza del Ángel” (conocida popularmente así) es la Onza Libertad.

Pero, ¿Por qué “Troy” y “Onza”?

La palabra onza proviene del latín ūncia, la ūncia era la unidad fraccionaria empleada por los romanos. En el contexto monetario, la uncia era la moneda de valor correspondiente a 1/12 de as (moneda romana). Es decir era parte de su sistema de monedas y pagos.

La onza troy proviene del peso troy el cual es un sistema de unidades de masa utilizado habitualmente para metales preciosos, piedras preciosas y pólvora. El nombre procede de Troyes, Francia, pues se sabe que el sistema troy de pesos se usaba allí en la época medieval, en la feria celebrada en Troyes, en el noreste de Francia. Hay 12 onzas troy en cada libra troy. Coloquialmente podría decir que la «mama de la onza» es la libra. La libra es de mayor peso que la onza.

Ahora bien, ¿medalla o moneda?

En la República Mexicana, la Ley Monetaria de los Estados Unidos Mexicanos, en su numeral 2 Bis menciona:

También formarán parte del sistema las monedas metálicas acuñadas en platino, en oro y en plata, cuyo peso, cuño, ley y demás características señalen los decretos relativos.

Estas monedas:

I.-Gozarán de curso legal por el equivalente en pesos de su cotización diaria;

II.-No tendrán valor nominal;

III.-Expresarán su contenido de metal fino; y

IV.-Tendrán poder liberatorio referido exclusivamente al pago de las obligaciones mencionadas en el segundo párrafo del artículo 7o. Dicho poder liberatorio será ilimitado en cuanto al número de piezas a entregar en un mismo pago.

En otras palabras, son monedas.

Se tienen antecedentes que desde la década de 1940 se comenzó a cristalizar la fabricación de piezas de ahorro o de alto contenido en metal precioso. En 1947 se acuña una prueba que sería utilizada hasta 1949 con el diseño de la onza que conocemos, se conocen con variedad de giro de moneda y de medalla. Citando al señor Theodore Buttrey en México se  acuña esta onza por dos razones:

“Para demostrar al mundo la calidad y el equipamiento con el que contaba la Casa de Moneda de México”

“Para que el gobierno disponga de grandes cantidades de monedas de inversión en plata”

Monto de acuñación 1947 (estimado): 20 – 30 piezas.

En sus obras el autor William Laurence Hanks señala que la Onza surgió como un plan de relaciones públicas y recolección de fondos (enfocado al extranjero), después de la devaluación de 1949 se deseaba probar al mundo que la nación tenía la capacidad económica así como las destrezas de acuñación (con el propósito final de llegar a levantar pedidos en naciones foráneas), con el acumulamiento de plata que se tenía  se deseaba vender los excesos a nivel internacional, así nace la Onza. Un millón de piezas fueron troqueladas, con un precio de $1 USD cada una, aunque el plan funciono en un principio no todas las unidades se agotaron, siendo aún posible adquirías en instituciones bancarias (para mediados de los 70s).

Un tercer autor señala que el motivo principal de estos tejos de plata fue el de exportar y vender a un precio justo nuestra plata en los mercados nacionales e internacionales y evitar (hasta donde fuera posible) la fundición de nuestra moneda acuñada y , sobretodo la salida de esta en forma clandestina hacia el extranjero. Así también estos tejos de plata pura servirían para fomentar las orfebrería y joyería mexicana, Antonio Deana Salmerón, 2000.

Más aun, en el Tomo I «Historia Numismática de México» del Dr. Alberto F. Pradeau menciona sobre estas onzas lo siguiente:

Tenían por objeto ponerla a la venta al público y, principalmente ofrecerla al mercado internacional. El proyecto fue encabezado por el subdirector del Banco Rodrigo Gómez, su propósito esencial era mostrar a todos los países del mundo, la facilidad con que podrían efectuar las transacciones comerciales con estas piezas u otras parecidas, mundialmente aceptadas, en vez de usar barras de plata, cuyo manejo y cálculo consumen tiempo y dinero. Otro de los beneficios que esta emisión produciría, estribaba en dar a conocer a los países carentes de facilidades, la labor que llevaba a cabo la Casa de Moneda de México, lo que posiblemente daría lugar a que se obtuviesen otros contratos de acuñación que aumentarían las labores de la ceca u daría salida al exceso de metal que en sus arcas se encontraba almacenado

La onza de 1949 (y la prueba de 1947) tiene un diámetro de 41mm, un peso de 33.625 gramos, canto estriado, y una pureza de 0.925 (92.5% plata) en el reverso una balanza marcando el peso en la parte inferior central, la ley de la moneda en la parte superior derecha y alrededor de la gráfila la leyenda una onza troy de plata pura 480 granos de plata. En el anverso una prensa de volante, el año de manera curva y alrededor de la gráfila la leyenda Casa de Moneda de México. De esta onza se acuñaron 1 millón de piezas que se distribuían en el Banco de México y en Nueva York (más tarde en bancos alrededor del país). El diseño es de Manuel Luna Negrete El número KM de la onza de 1949 es: M49a

En las Memorias de la Casa de Moneda de México de 1949 se menciona que las onzas de 1949 se acuñaron por un millón de piezas de mayo a junio de ese mismo año, empleándose 24 cuños de anverso y 25 de reversos, lo que arroja un aproximado de 41,666 onzas por juego de troqueles. En el citado año el mes de menor amonedación de onzas fue mayo con 2,000 piezas y el mayor junio con 500,000, su precio original por pieza oscilo los $6 pesos.

Monto de acuñación 1949: 1,000,000.

¿Porque dice granos en el reverso?

 «480 granos de plata pura»  Ese sistema era común en el siglo XIX mas que nada en las monedas 8 reales. Grano es una unidad de medida de la ley de los metales preciosos y las gemas.Cuando se refiere a la plata, su valor es 1/24 del dinero.

1 grano = 3,472 milésimas 24 granos = 1 dinero = 83,333 milésimas

En otras palabras 1 grano es 0.064 gramos.

La cantidad acuñada no se vendió instantáneamente, esto sumado a las troquelaciones de moneda circulante en alto contenido de plata como 5 pesos Cuauhtémoc, 5 y 10 pesos Hidalgo, por tal acumulación la acuñación de Onzas Troy continuaría décadas después cuando la situación lo amerito.(Para conocer más de estas monedas CLICK AQUÍ).

Tendrían que transcurrir 29 años, en 1978 regresa la Onza Troy, con la mismas características que la de 1949 excepto con unos relativos cambios en el diseño, para este año se acuñan 280,000 piezas y existen dos variantes, en el espacio en las leyendas “DE MONEDA” (el autor considera esta como a la onza más escasa para ver por qué CLICK AQUÍ) El número KM de la onza de 1978 es M49b Fue el 23 de febrero de 1979 cuando la prensa nacional anunció el regreso de las onzas de plata, las cuales tuvieron un costo de $205 pesos inicialmente.  En de suponer la distribución de la onza de 1978 comenzó al año siguiente.

Monto de acuñación 1978: 280,000.

Para el siguiente bienio las acuñaciones continúan, en 1979 y 1980 con las mismas características que la de 1978, por su elevando monto de acuñación, estas son las más comunes, aún se encuentran en condiciones brillantes y sin circular. En la onza fechada en 1979 existen 2 variedades. El número KM de la onza de 1979 es M49b.3 y de 1980 M49b.5

La acuñación continua de onzas en el trienio de 1978 a 1980 a diferencia de la acuñación única de 1949, obedece a las circunstancias económicas del momento, ejemplo de ello es que en el Informe Anual 1979 Banco de México se informa que durante 1979 los precios del oro y de la plata mostraron incrementos sin precedentes en la historia moderna. El precio de la onza troy de oro pasó de 227 dólares en enero a 524 dólares al final del año, ahora bien, en lo que toca a la onza troy en plata precio en 1980 subió de $1.77 USD a $20.63 USD. Bajo ese mismo orden de ideas, en el mismo lapso el precio de la plata se multiplicó más de cinco veces, y al término de 1979 la onza troy de este metal se cotizó a 32.2 dólares.

Dentro del estudio de las pruebas se conocen ejemplares de las Onzas de 1979 y 1980 en terminado espejo (proof).

Monto de acuñación 1979: 4,508,000

Monto de acuñación 1980: 6,104,000

La razón del porque de dejaron de fabricar Onzas Troy responde a varias hipótesis:

• Acumulación en «stock», piezas no vendidas.
• Fluctuación de los precios de los metales.
• Decadencia económica nacional.
• Reformulación del cono monetario para 1980 (año de múltiples pruebas en moneda).
  

  Primera Onza Libertad en plata, 1982.

  Sería hasta 1982, (desde 1981 se acuñan pruebas) que inciaría el famoso «Programa Libertad», México quería poder establecerse en el mercado de valores, es por eso que de 1982 a la fecha se acuñan piezas en plata, oro y platino (1989) en diferentes pesos y medidas. (Para conocer las acuñaciones de platino CLICK AQUÍ)

Es de parecer obvio que las Onzas Troy habían concluído de manera oficial en 1980, a la sazón de que para 1982 ya se tenía un exitoso substituto, limitando la serie a 4 años oficiales: 1949, 1978, 1979,1980, no entran en el listado las pruebas de 1947 y 1978.

Sin embargo, se conoce un quinto ejemplar muy escaso de 1989, en dicho año Napoleón Gómez Urrutia estaba al frente de la Casa de Moneda, Miguel Mancera Aguayo como gobernador del Banco de México, Pedro Aspe como Secretario de Hacienda y Carlos Salinas de Gortari como presidente de México.

Pero en 1989 se acuñó la onza Libertad con normalidad, incluso en terminado satin y espejo. Convivieron de manera oficial dos instrumentos monetarios de ahorro o inversión en metales preciosos, aunque si bien, la Onza Troy de 1989 no se comercializó en la misma dimensión que la Onza Libertad de ese año.

La denominada «Onza del Capricho» se le llama así ya que según versiones su existencia de debe  a que un alto funcionario de la Casa de Moneda le agradaba mucho este diseño y la mando a acuñar de nueva cuenta, a pesar de haberse dejado de troquelar casí una década atrás. Es decir, fue su «Capricho».

Por otro lado, probablemente solo se trato (pulió, para acuñar en terminado proof) el lado de la balanza, el reverso, siendo que en ese mismo año se fabrico una medalla que comparte una de las caras de la «Onza del Capricho», en las mismas dimensiones, el anverso.

Se especula que menos de 50 Onzas Troy de 1989 se fabricarón, tampoco está enlistada en ningún catálogo, excepto el Bailey/Whitman (2016) con número BW: 875.9.

Onza Troy 1989. Monto de acuñación -50 piezas.

Tiene las mismas características que una onza de 1980 excepto por el acabado y el año.

Fe de erradas: Se trata de punzones. 

Existen varias versiones del porqué de esta onza, más solo se menciona la hipótesis con mayor divulgación. En subastas numismáticas se ha vendido con un precio de salida elevado, recientemente en $22.500 pesos mexicanos. Subastadores como Heritage, Richard Long, Alberto Hidalgo y Duane Douglas las han subastado. Por ultimo en 2009 Heritage Auctions la subasto en un precio de salida de $2,185 dolares

Bibliografía:

• 2014, Whitman, Bailey Don, Whitman Encyclopedia of Mexican Money, Volume 1
• 2013, Krauze Publications, Harper David, North American Coin & Prices, 22nd Edition
• 1990, Carnet/Prosa, El dinero de Plastico, pg 77
• 1957, Pradeau, Alberto Francisco,  Historia Numismática de México Tomo I. Sociedad Numismática de México. México.D.F.
• 1963, Buttrey Theodore, Whitman, «Mexican Decimal Coins»
• 1976, Laurence Hanks, William, The Comprehensive Catalog And Encyclopedia Of Modern Mexican Coins, Aztlan Numismatic Society. 
• Catálogos de Subastas  «El Mundo de la Moneda»
• 1992, Sociedad Numismatica de México, Boletin 157
• 1978, Antonio Deana Salmeron, Revista Monedas, Sociedad Numismática de Puebla, «Los Tejos de Plata denominados «Onzas Troy» reaparecieron en 1978″, Puebla de los Angeles, marzo 1978. 
• 1979, Informe Anual Banco de México, México D.F., recuperado de: https://www.banxico.org.mx/publicaciones-y-prensa/informes-anuales/%7B2036978E-B170-3BB1-DF97-CD9A9A06650D%7D.pdf 
• APMEX…. http://www.apmex.com
• Heritage Auctions….  www.ha.com
• Deana Salmerón, Antonio, (2000), La Onza de Plata con el Ángel de la Victoria en el Reverso», en El Boletín Numismático, No. 186, enero – marzo, 2000. 
• Agradezco la ayuda del Sr. Siddharta Sánchez Murillo para la elaboración de este articulo.